Como consecuencia de que en el Estado de México se tienen 12 años de «sequía» para autorizar licencias de desarrollos habitacionales por parte de autoridades estatales y municipales, existe una escasez de vivienda nueva para alrededor de 794 mil 146 trabajadores que cotizan actualmente en el Infonavit y que ya precalificaron, con lo cual se está violentando lo que establece la misma Constitución y se corre el riesgo de nuevos asentamientos irregulares.
En entrevista, Jorge Díaz Galindo Hurtado, presidente de la Asociación Nacional para la Promoción, Atención y Defensa de los Usuarios de la seguridad Social (ANPADEUSS, O.S.C.), pidió tomar en consideración que para la oferta sólo existen 4 mil 879 inmuebles; es decir, el 0.6%, con lo cual no se tiene ni el 1%.
“Las viviendas que se han autorizado en los últimos años han sido muy escasas, lo cual resulta una contradicción para una entidad, en la cual se busca mayor inversión extranjera, porque no tienen en dónde vivir los trabajadores”, indicó.
El también Oficial Mayor de la CTM, aseguró que se trata de una problemática generalizada en todo el Estado de México, pero, por ejemplo, en el caso del valle de Toluca, se tiene a 109 mil trabajadores que solicitaron una vivienda; en Lerma, 37 mil; en Metepec, 18 mil; en Jilotepec, 15 mil y Atlacomulco, 10 mil.
“Si no hay oferta de vivienda, la gente comienza a buscar asentamientos irregulares para contar con un patrimonio, aspecto que se convertirá en un problema muy grave en los próximos años. Afortunadamente, la próxima administración estatal que encabezará Delfina Gómez Álvarez, se encuentra muy interesada en comenzar a resolver esta problemática”, enfatizó.
La próxima gestión estatal, abundó, ya está mostrando interés por abordar esta problemática de falta de vivienda; es decir, contar en el futuro con inmuebles debidamente planificados, bien ubicados y con todos los servicios, en coordinación con los 125 ayuntamientos, empresarios, sindicatos y el Infonavit.
El especialista en temas de seguridad social, consideró que en este momento el problema ya no consiste en que las casas se encuentren lejos de los centros de trabajo, porque ya se está tratando de corregir esta situación, sino que simplemente no se han venido construyendo inmuebles nuevos para los y las derechohabientes del Infonavit.