Las personas privadas de su libertad en los 20 penales mexiquenses podrán ver los dos primeros debates en las áreas comunes de cada centro, para que puedan tener elementos razonables para votar.
Quienes no podrán ver ni uno sólo son las personas presas en el penal federal de máxima seguridad del Altiplano, por falta de condiciones para hacerlo.
El vocal de la Junta local del INE, Joaquín Rubio Sánchez, informó que ya se analiza la posibilidad de distribuir propaganda a cada una de las personas presas, pero falta definir qué tipo de documentación será, la cantidad y requisitos, así como las fechas en la cual se les podría entregar.
En el Estado de México contabilizaron en diciembre 7 mil 800 personas privadas de su libertad sin sentencia en los 20 centros preventivos, es decir que tienen sus derechos políticos a salvo y pueden votar en la elección presidencial, pero algunos ya recuperaron su libertad, otros no tenían credencial vigente o ya están purgando una condena.
La semana pasada, del 6 al 11 de marzo les preguntaron quién quiere participar en la elección y 5 mil 250 personas en penales estatales y 124 del CEFERESO número 1, dijeron que sí, prácticamente 99 por ciento de las y los internos, aunque la cifra irá disminuyendo por quienes salgan libres o sean condenados en estos cuatro meses. En promedio salen de la cárcel entre 200 y 250 personas al mes.
Las votaciones en las prisiones se llevarán a cabo entre el 6 y 20 de mayo, por lo cual sólo les dará tiempo ver dos de los tres debates, los que se tienen programados para el 7 y 28 de abril, pero no el del 19 de mayo, porque ya estarán en la recepción de votos de los últimos grupos.
Los sufragios van a ser recibidos en distintas fechas. Se instalarán mesas con representantes de los partidos y las boletas utilizadas serán resguardadas hasta el 2 de junio, en la cual se entregarán a la junta distrital que corresponda. Por ejemplo, en el caso de Zinacantepec está el penal federal del Altiplano, la cárcel estatal de Santiaguito y la Quinta del Bosque.