Los internos de 8 penales del Estado de México iniciaron una huelga de hambre indefinida junto con sus familiares debido a los malos tratos, falta de agua, medicinas, humillaciones, asesinatos, torturas, insuficientes alimentos y extorsiones por parte de los custodios y los directores de las cárceles.
Alicia Pérez Monzón, integrante del colectivo “Presunción de Inocencia y Derechos Humanos”, informó que la huelga de hambre será permanente hasta que no se les dé una respuesta favorable a sus demandas.
“Estamos pidiendo transparencia y cuentas de todos los recursos que se han destinado al Sistema Penitenciario, porque existen desvíos millonarios de dinero que le corresponde a los penales”, sostuvo Alicia Pérez, madre de un interno del penal de Barrientos.
Alicia aseguró que no hay certificación de jueces en el sistema judicial del Estado de México y que cada interno representa para ellos cinco mil pesos al mes, dinero que pagan las familias.
“Es un trato indigno, les cobran por dormir, meter alimentos, bañarse y algunas familias pueden apoyar a sus familiares; el 60% de los presos no tienen ayuda de sus familias, porque ha muchos los han abandonado en las cárceles”, precisó la representante del colectivo
Aproximadamente más de 100 familias de internos del Centro de Readaptación Social “Juan Fernández Albarrán” de Tlalnepantla han colocado carpas, casas de campaña, sillas, mesas y mesas para pasar la noche en el lugar.
“Esta huelga es una medida radical para protestar por tanta corrupción que se presenta en los penales del Estado de México, reiteraron las esposas, hermanas y madres de los internos que se encuentran en Barrientos.
Pidieron la ayuda de la gobernadora Delfina Gómez, para que intervenga en los penales del Estado de México y le recordaron que prometió un trato justo a los mexiquenses “y seo debe de hacer con todos los que están privados de su libertad”.
“Vamos a quedarnos afuera de Barrientos hasta que nos hagan caso, hasta el momento ningún funcionario del penal ha salido a atendernos y solo han entrado los de Derechos Humanos”, dijo Alicia Pérez.
A la huelga de hambre se suman familiares de las personas privadas de la libertad de las prisiones de Otumba, Chalco, Chiconautla, Neza-Bordo, Texcoco, Santiaguito, Tenancingo, Tenango del Valle y Sultepec. En tanto que otro contingente se encuentra frente al Palacio Nacional.