Pocas son las personas que éste lunes visitaron las casas de empeño que se ubican en el centro de Toluca y calles aledañas, luego de iniciar la cuesta de enero.
Éste término utilizado de forma popular engloba un fenómeno que afecta la economía de algunos individuos, debido a los gastos elevados que realizaron en diciembre por las celebraciones, la compra de regalos y el aumento de los precios como resultado de la inflación.
Con la cartera casi vacía y con el objetivo de obtener dinero antes de llegue el pago de honorarios, algunos optan por empeñar sus pertenencias, comentaron algunos pignorantes.
‘Claro que todos los que venimos es por dinero. Muchos nomas andamos esperando la quincena pero a veces parece eterna y que no llega’, comentó una mujer que acudió a la casa de empeño.
Y aunque este día la llegada de personas fue poca, quienes laboran en éstos establecimientos aseguran que es en diciembre, enero y febrero cuando reciben la visita de más personas.
‘En el último y los primeros meses del año es cuando más vemos que llegan’, dijo un trabajador.
Lo que más empeñan son celulares, joyería y herramientas es lo que más empeñan los pignorantes precisó, Eduardo Navarrete, encargado de una tienda de empeño.
‘El porcentaje más alto esta en los teléfonos celulares, le siguen herramientas como taladros , pulidores y máquinas de soldar, y luego la joyería’, detalló.
En cuarto lugar en la lista de lo que más empeñan las personas se ubican las pantallas y le siguen las consolas de videojuegos y videojuegos.
Asimismo, puntualizó que en enero además de los artículos mencionados varios entregan pantallas y electrodomésticos a cambio del dinero.
A veces hasta pensamos que algunas personas vienen a empeñar las televisiones, licuadoras y los electrodomésticos que se ganan en las rifas que hacen en sus trabajos por las fiestas de diciembre
Sobre el número de personas que recuperan sus pertenecías, señaló que aproximadamente solo 2 de 10 pignorantes consiguen rescatar lo que empeñan.
‘Los que llegaban a recuperar sus cosas los sacaban en junio o julio por qué les daban sus utilidades’, mencionó.
Especificó que en diciembre la mayoría de las personas que empeña, lo pierde todo, ya que debido a los gastos que se realizan en el mes, pocos son los que cubren con el primer pago y luego, deciden ya no abonar.
Pese a que la tasa de interés es alta y el porcentaje del precio real del artículo es alto, el préstamo desciende, señaló el colaborador.
Y aunque las condiciones no son las más favorables para los pignorantes, ellos siguen empeñando, afirmó el hombre.
‘Si algo cuesta 2,000 en el mercado, ya el artículo usado aproximadamente lo máximo, dependiendo las condiciones se les presta hasta los mil 100 pesos y la tasa de interés sobre ese préstamo es de 24.3%’.
Apuntó que el producto que conviene empeñar es la joyería, ya que no se devalúa. “Ahí si prestan bien por qué el oro es el mejor negocio para las casas de empeño”, dijo.
Además, explicó que las casas de empeño ofertan un artículo solo 15% menos de lo que se vende en el mercado y en ocasiones también aumentan su valor.
‘Y pues para nosotros si en el mercado valía esos dos mil pesos, nosotros lo sacabamos a la venta entre los $1,850 a los $2,300’, resumió.