El promedio de almacenamiento de las principales presas agrícolas del Estado de México se encuentra en un nivel favorable que promedia el 87 por ciento de su capacidad total, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA).
De las once presas consideradas destaca la presa Ignacio Ramírez ubicada en Almoloya de Juárez que opera al 102 por ciento de su capacidad superando el máximo esperado otras presas con almacenamiento pleno son Taxhimay en Villa del Carbón y San Andrés Tepetitlán en San Felipe del Progreso ambas al 100 por ciento de su capacidad.
Por otro lado la presa con menor nivel de almacenamiento es la presa José Antonio Alzate localizada en Temoaya que se encuentra al 30 por ciento de su capacidad representando un riesgo para las actividades agrícolas en su región, que se suma a la de Huapango, en Timilpan donde se reporta un bajo nivel con el 40 por ciento.
Las presas ubicadas en el norte de la entidad mexiquense como Danxho, en Jilotepec se encuentra al 96 por ciento; Ñado y el Molino en Aculco están al 87 y 94 por ciento respectivamente; Francisco José Trinidad Fabela, en Atlacomulco al 70 por ciento.
La presa de Guadalupe en Cuautitlán Izcalli, opera con el 85 por ciento y La Concepción en Tepotzotlán al 92 por ciento.
Al respecto, la secretaria del Campo, María Eugenia Rojano Valdés, informó que el agua de disposición agrícola se encuentra en buenos niveles en la mayoría de las presas, por lo que los agricultores tendrán la posibilidad de tener un ciclo agrícola bueno.
Recordó que el mayor número de hectáreas que se siembran son de temporal, correspondiente al ciclo primavera-verano, por lo que ante la temporada de estiaje, están impulsando es la creación de bordos y el desazolve de los que ya se encuentran operando.