La Arquidiócesis de Tlalnepantla condenó el ataque que dejó como resultado una mujer muerta y varios heridos en el atrio de la Basílica de Nuestra Señora de los Remedios en Naucalpan, Estado de México, el sábado 14 de diciembre a la salida de una celebración eucarística por unos XV años.
En un comunicado, la Asociación religiosa a la cual pertenece la Basílica de Nuestra Señora de los Remedios manifestó su rechazo a toda forma “a toda forma de violencia contra toda persona, especialmente contra las mujeres y las familias, en todo lugar, pero sobre todo en este que es un espacio de oración, de encuentro fraterno y de esperanza”.
Se unieron en oración por el eterno descanso de la víctima y por la pronta recuperación de los heridos, “pero también dirigimos a Dios nuestra plegaria pidiendo por la conversión de quienes tanto daño hacen a nuestra sociedad, y sobre todo imploramos el don de la paz para nuestra patria y nuestro mundo”.
“Queremos buscar la paz y no dejarnos llevar por la inquietud, aunque fortaleciendo también nuestro compromiso por recibir y construir la paz que de Dios viene en unidad y colaboración con los hombres y mujeres de buena voluntad”.
Se realizó un recorrido por la Basílica de los Remedios y pudo constatar que el recinto mariano continúa con las celebraciones eucarísticas en las capillas y nave principal, ahí los sacerdotes dieron lectura al comunicado:
“Con profundo pero con la esperanza puesta en Jesucristo príncipe de La paz la basílica de nuestra señora de Los Remedios manifiesta su repudio a toda forma de violencia y ataque contra la vida habiendo sufrido un ataque directo a una familia el día 14 de diciembre a las 17:05 horas en el atrio de la basílica al salir de una ceremonia de acción de gracias en el cual una mujer perdió la vida y hubo también varios heridos que hemos manifestado nuestro total rechazo a toda forma de violencia contra toda persona especialmente contra las mujeres y las familias en todo lugar”, dijo el Padre Feliciano.
Los feligreses que acudieron a misa se dijeron consternados por los hechos delictivos. “Cómo es posible que hasta en una iglesia en un santuario sagrado ya no podemos ni estar a gusto ni seguros porque se supone que aquí es donde nosotros nos podemos sentir un poquito mucho más seguros para lo que pasó”. Teresa Castillo, feligresa.
“Estamos escuchando que hubo un problema muy feo aquí bueno yo escuché hoy que hubo un asesinato con una mujer aquí y creo dos o tres heridos es lo que escuché nada más en la misa que estuve escuchando le digo estamos mal en nuestra sociedad en todas partes” Álvaro Jiménez, dijo otro creyente.