El gobierno mexiquense que encabezará la maestra Delfina Gómez planea hacer una reestructura orgánica a la administración estatal por lo que la Legislatura del estado habrá de realizar reformas a la Ley de la Administración Pública del Estado de México para crear nuevas secretarías y modificar otras que forman parte del sector central y organismos descentralizados.
El diputado local, Maurilio Hernández González, coordinador del grupo parlamentario del Morena y quien ha participado en todas las reuniones de transición entre el gobierno saliente de Alfredo del Mazo y el entrante de Delfina Gómez comentó que ya se tienen previstas cambiar de nombre algunas dependencias y crear la Secretaría del Agua, por la importancia que ha dado la gobernadora electa a este tema.
Tras acudir a la tercera reunión de los equipos de transición, que encabezaron Delfina Gómez y Alfredo del Mazo, el diputado Maurilio Hernández confesó que se prevé cambiar de nombre la Secretaría de Desarrollo Social para que a partir del 16 de septiembre sea la Secretaría del Bienestar, encargada de la operación de todos los programas sociales estatales.
También se modificará la Secretaría de la Contraloría para ser la Secretaría de la Función Pública, y la Secretaría de Justicia y Derechos Humanos será una consejería jurídica de la gubernatura.
Maurilio Hernández confesó que todavía podrá haber más ajustes, pues el equipo de transición del gobierno electo de Delfina Gómez, aún se encuentra elaborando el diagnostico integral de la administración pública y hasta no estar concluido, se determinará que secretarías continuarán tal y como están, cuales cambiarán de denominación y qué otras podrían desaparecer.
En la reunión de los equipos de transición también participó el senador con licencia Higinio Martínez, quien fue el responsable de introducir a la política a la maestra Delfina Gómez hace once años.
Higinio Martínez reiteró que la administración que encabezará Delfina Gómez a partir del 16 de septiembre no tiene contemplado recortar personal de base del gobierno estatal, por lo que los servidores públicos pueden estar tranquilos de que no perderán su empleo.
Sin embargo se sabe que sí habrá ajustes en la alta burocracia, donde se prevén recortes salariales y de prescindir de algunas plazas del personal de confianza.