Durante el pasado proceso en el Estado de México, en el que se eligió gobernadora, la Fiscalía Especializada en Materia de Delitos Electorales (FISEL) de la Fiscalía General de la República (FGR) recibió apenas 19 denuncias por delitos electorales.
En tanto a través de sus sistemas de Atención Ciudadana (Fedetel y Fedenet) se recibieron 429 llamados ciudadanos en torno a distintos presuntos delitos electorales.
Previo al inicio formal del proceso electoral en la entidad, el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) llamó a la población a conocer e identificar los delitos electorales más frecuentes en busca de ejercer un voto libre, informado y secreto.
De acuerdo con el registro, las denuncias que más se presentan son la presión para la compra del voto, el condicionamiento de programas sociales; la retención de credenciales para votar; el ejercicio del sufragio más de una vez en una misma elección y actos de proselitismo el día de la jornada electoral.
Ante ello, el llamado para conocer este catálogo para que se informe, denuncie y contribuya a la prevención de estos.
Se informa que otras conductas que constituyen un delito electoral son aquellas por parte del funcionario de casilla como instalar, abrir o cerrar una casilla fuera de los tiempos establecidos.
También ubicarla en lugar distinto al asignado o permitir que una persona emita su voto sin cumplir con los requisitos necesarios.
La ley general en materia de delitos electorales establece que cualquier persona que cometa una falta de este tipo será acreedora a una sanción de 50 a 100 días de multa o prisión de seis meses a tres años.